Sistema dogmático de una hetería soteriológica
La dogmática o sistema dogmático inherente a una hetería en cuanto tal –sistema cuyo conocimiento suele ser preceptivo de algún modo para sus miembros– habría de constar de las siguientes tesis mínimas: (I) Ante todo, una tesis general en la que se reconozca la naturaleza individual y subjetiva de los fines prácticos constitutivos de cada uno de los elementos de la clase de clientes de la hetería. Este “trámite general” (como podríamos denominarlo) puede ser ejecutado de modos muy diversos desde el punto de vista ideológico, psicológico, etc. En cualquier caso, la ejecución del trámite general deberá incluir la definición explícita de la necesidad de algún tipo de cooperación entre los elementos de estas clases, a efectos de la realización de sus fines propios. En realidad, este trámite general comprende la exposición de una tectónica antropológica trimembre (que damos en el punto III), una vez establecidas las situaciones respecto de la hetería. (II) Podemos distinguir tres situaciones de los “elementos del universo del discurso”: (1) Una situación que necesariamente deberá poder ser ocupada por cada elemento de las clases definidas en (I), un trámite de reconocimiento de una “situación de flotación” por respecto de la hetería. (La doctrina psicoanalítica del inconsciente podría venir determinada en el contexto de este trámite: el individuo es inconsciente precisamente porque está fuera de la hetería.) La situación de flotación nos remite a los elementos de la clase, en cuanto son individuos corpóreos dotados de una determinada cantidad de energía, de algún modo impersonal. La situación de flotación es, pues, coextensiva con la clientela virtual de la hetería. (2) La dogmática contendrá también un trámite orientado a establecer la necesidad de una segunda situación, la situación de la subjetividad, atribuible a todos los elementos del “universo del discurso”. Si el trámite de individualidad nos conduce a una situación flotante por respecto de la hetería, el trámite de subjetividad de esta individualidad nos conduce a una situación orientada ya hacia la hetería (una voluntad de curación); pues la subjetividad es aquí tanto como consciencia de la individualidad, en cuanto necesita de la ayuda y cooperación de otras subjetividades. (3) Un trámite de personalización, en virtud del cual el individuo subjetivo se defina como cliente de la hetería, moldeado por ella de tal suerte que la facticidad subjetiva aparezca como un destino personal.